El pasado domingo, 7 de septiembre de 2025, un comentario de la reconocida actriz y presentadora Whoopi Goldberg durante su programa en Estados Unidos desató una tormenta de controversia que rápidamente cruzó fronteras y llegó hasta España. En un segmento dedicado a discutir eventos deportivos internacionales, Goldberg minimizó los logros del joven prodigio del fútbol español,

Lamine Yamal, al declarar tajantemente: “Solo es un futbolista”. La frase, dicha con un tono de indiferencia, provocó de inmediato una atmósfera tensa en el plató, donde los demás panelistas se mostraron visiblemente incómodos ante la falta de reconocimiento hacia el talento del jugador del FC Barcelona, que a sus 18 años ha traído gloria a España con actuaciones estelares tanto en su club como en la selección nacional.

Lamine Yamal, una de las figuras más prometedoras del fútbol mundial, ha sido clave en los recientes éxitos de España, incluyendo su papel destacado en la Eurocopa 2024, donde fue nombrado mejor jugador joven del torneo, y su contribución en la reciente goleada de 0-6 ante Turquía en las eliminatorias para el Mundial de 2026.

Con dos asistencias en ese partido y un desempeño que lo ha convertido en un ídolo para los aficionados, Yamal ha demostrado ser mucho más que “solo un futbolista”. Su velocidad, visión de juego y madurez en el campo han sido elogiadas por entrenadores, compañeros y analistas, lo que hizo que las palabras de Goldberg fueran percibidas como un desdén injustificado hacia un joven que está redefiniendo el fútbol español.

Apenas diez minutos después de que el programa concluyera, Lamine Yamal respondió al comentario de Goldberg a través de su cuenta oficial en la red social X, con un mensaje breve pero contundente de diez palabras: “El talento no necesita palabras, los hechos hablan por mí”. La respuesta, elegante pero afilada, resonó rápidamente en las redes sociales, donde los usuarios, especialmente en España,
no tardaron en salir en defensa del joven futbolista. La publicación de Yamal se volvió viral en cuestión de minutos, acumulando millones de interacciones y generando una ola de indignación contra Goldberg, quien fue acusada de minimizar el impacto cultural y deportivo de una estrella emergente que representa el orgullo de toda una nación.
En las redes sociales, los aficionados españoles expresaron su frustración con mensajes como “Whoopi no tiene idea de lo que Lamine significa para nosotros” y “Subestimar a Yamal es subestimar a España”. Incluso figuras públicas y exfutbolistas se sumaron a la conversación. Xavi Hernández, leyenda del FC Barcelona, escribió en X: “
Lamine no es solo un futbolista, es una inspiración para los jóvenes”. El hashtag #YamalNoEsSoloUnFutbolista se convirtió en tendencia mundial, acumulando más de 500,000 publicaciones en menos de dos horas.
La reacción no se limitó a España; fanáticos del fútbol en América Latina, Europa y otras partes del mundo también criticaron a Goldberg, señalando que su comentario reflejaba una falta de comprensión sobre la importancia del fútbol como fenómeno global.
El impacto de las palabras de Goldberg no solo se sintió en las redes sociales, sino también en los medios de comunicación españoles, que dedicaron amplios espacios a analizar el incidente. Programas deportivos como “El Chiringuito” y “Estudio Estadio” debatieron acaloradamente sobre la declaración de la presentadora,
con algunos comentaristas acusándola de ignorancia y otros sugiriendo que sus palabras podrían haber sido sacadas de contexto. Sin embargo, la mayoría coincidió en que el comentario fue innecesariamente despectivo hacia un jugador que, a pesar de su corta edad, ha demostrado una madurez excepcional tanto dentro como fuera del campo.
La respuesta de Yamal, por su parte, fue ampliamente elogiada por su inteligencia y mesura. En lugar de caer en provocaciones o responder con agresividad, el joven optó por un mensaje que resaltaba su confianza en su propio talento y en los logros que lo han convertido en una figura de relevancia mundial.
Analistas destacaron que la frase de Yamal no solo avergonzó a Goldberg, sino que también consolidó su imagen como un deportista con carácter, capaz de manejar la presión mediática con la misma facilidad con la que dribla a sus rivales en el césped.
El incidente también abrió un debate más amplio sobre el reconocimiento de los deportistas jóvenes en el escenario global. Lamine Yamal, nacido en Esplugues de Llobregat de padre marroquí y madre ecuatoguineana, representa la diversidad y el talento de una nueva generación de futbolistas españoles. Su ascenso meteórico ha sido comparado con el de leyendas como Lionel Messi,
y su capacidad para manejar la fama a tan temprana edad lo ha convertido en un modelo a seguir para muchos. Las palabras de Goldberg, en este contexto, fueron vistas por muchos como un intento de reducir la importancia de un jugador que trasciende el deporte, siendo un símbolo de integración y excelencia.
En el ámbito deportivo, el incidente no parece haber afectado el enfoque de Yamal. Según fuentes cercanas al FC Barcelona, el jugador continuó entrenando con normalidad y se prepara para el próximo partido de La Liga contra el Real Betis, donde se espera que siga demostrando su valía. Mientras tanto,
en Estados Unidos, algunos medios reportaron que Goldberg recibió críticas por su comentario, pero hasta el momento no ha emitido una disculpa oficial ni ha aclarado sus palabras. En las redes sociales, sin embargo, los usuarios especulan que la presentadora podría abordar el tema en el próximo episodio de su programa, dado el alcance de la controversia.
En conclusión, el comentario de Whoopi Goldberg sobre Lamine Yamal no solo desató una reacción inmediata en las redes sociales, sino que también puso de manifiesto la pasión que el fútbol despierta en todo el mundo. La respuesta de Yamal, con su ingenio y serenidad, no solo dejó en evidencia la falta de tacto de la presentadora,
sino que también reforzó su estatus como una estrella que va más allá del terreno de juego. Mientras España celebra a su joven héroe, el incidente sirve como un recordatorio de que el talento, como el de Yamal, no necesita palabras para brillar: sus hechos, dentro y fuera del campo, hablan por sí mismos.